De superorganismos, antibióticos y el sexo de las bacterias

Simposio sobre higiene en Zell am See, con participantes de alto nivel

(c) Hagleitner Hygiene International

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Zell am See (OTS) - En términos médicos no cabe duda: "No estamos solos", aunque de entrada suene un poco a paraciencia. Y es que solo la mínima parte de las células de nuestro cuerpo son humanas. En una proporción diez veces mayor existen los microorganismos ajenos al cuerpo. Su presencia resulta decisiva: en el intestino, en los pulmones, en la piel y en las mucosas, prácticamente en todas partes desde la coronilla hasta los dedos de los pies. No hay una sola parte del cuerpo en la que no estén presentes, ni un solo lugar está libre de ellos. Ni en el líquido amniótico, ni en la orina, aunque tal cosa se haya creído durante mucho tiempo. En resumidas cuentas, en nuestro cuerpo viven aproximadamente 100 billones de microorganismos. Y cada uno de ellos parece actuar de forma integral.

Por ejemplo, el helicobacter pylori. Este bacilo tiene mala fama, ya que a menudo provoca enfermedades estomacales: inflamación, úlceras, e incluso cáncer. Pero, ¿puede ser que nos proteja del asma?

Preguntas como esta se han escuchado de la boca de médicos, especialistas en higiene y otras personas interesadas en Zell am See, al que han acudido invitados por Hagleitner Hygiene al Foro internacional de higiene de HAGLEITNER. Este ha tenido lugar del 7 al 8 de junio en el Ferry Porsche Congress Center, entre expertos de alto nivel.

Más de 90 invitados se congregaron para participar en las conferencias, intercambiar conocimientos y definir entre todos: ¿cuáles son los últimos avances? En torno a esta pregunta se planteó un tema complejo: "Nuestro microbioma y su importancia para la prevención de infecciones".

¿Qué resultados saca a la luz el simposio? Estas son las cinco tesis distintas en las palabras originales de los ponentes: 

Microbioma y protección frente a infecciones

"En el caso de la mayor parte de los microorganismos, en el intestino existen en cantidades cuantificables, en comparación con el resto de las partes del cuerpo. Cuando la interacción es correcta, pueden servir de protección, por ejemplo, contra enfermedades diarreicas infecciosas. Sin embargo, lo que ocurre en el intestino no solo tiene efectos locales. Los habitantes de este lugar influyen prácticamente en todos los procesos del cuerpo: En el caso de la diabetes, el microbioma tiene otro aspecto que en el caso de las enfermedades cardiovasculares. Y el caso del autismo es distinto al del asma. Por ejemplo, los médicos tratan de influir en la flora vaginal mediante el intestino, en general contra los hongos vaginales. A su vez, la flora intestinal adecuada es idónea incluso para servir de prevención contra infecciones nosocomiales. Todo esto coloca la higiene en un contexto significativo, a saber, el del cuidado del microbioma".

Priv. Doz. Dr. Markus Hell – MEDILAB (Departamento especializado de microbiología e higiene; laboratorio de enseñanza de la Universidad Privada de Medicina Paracelsus de Salzburgo) 

El intestino como depósito para gérmenes resistentes a los antibióticos

"Nuestro intestino es un importante lugar de transbordo, también para la información genética. Y los colonizadores de nuestro intestino saben aprovecharlo, como las bacterias, que pueden, por así decirlo, tener sexo entre ellas. No para reproducirse, sino para intercambiar plásmidos. Se trata de pequeños módulos de ADN con unos recursos especiales, por ejemplo, contra los antibióticos. Aunque: la resistencia a los antibióticos se puede transmitir en muchos casos. Por ejemplo, a través de los fagos: se trata de virus que atacan únicamente a las bacterias, las cuales pueden hacerles inmunes contra los antibióticos. También los fagos son capaces de infiltrar genes de resistencia en el material hereditario de las bacterias. En este sentido en el intestino pululan gran cantidad de genes de resistencia, muchos más de lo que se pensaba hasta ahora".

Prof. Dr. Béatrice Grabein – Hospital Clínico de la Universidad de Múnich 

Antibióticos, probióticos y el microbioma intestinal

"Incluso la ingesta de un antibiótico durante una semana puede modificar significativamente la composición del microbioma intestinal. No obstante, pasadas unas semanas en el caso de la mayoría de los adultos sanos se ha restablecido el estado inicial. Sin embargo, en los primeros años de vida de un niño, los antibióticos pueden tener efectos más intensos. Algunos estudios han demostrado que las terapias con antibióticos en esta etapa temprana de la vida están asociadas, entre otras cosas, con la aparición de sobrepeso en etapas posteriores de la vida".

Assoz. Prof. Priv.-Doz. Dr. Ines Zollner-Schwetz – Universidad Médica de Graz 

Protección ante las infecciones de las vías respiratorias mediante el microbioma del tracto respiratorio

"Las bacterias, virus y hongos pueden presentar, por así decirlo, una "larga respiración": Bajo nuestra epiglotis se encuentran en gran número, aunque estemos sanos, hasta dentro del ángulo más profundo de los pulmones. Esto demuestra que cuanto mayor sea la diversidad microbiana, es decir, la variedad de gérmenes, más estable será la salud de las vías respiratorias. Y viceversa: Cuanto más fuerte sea la colonización incorrecta, mayor será el problema. Esto resulta evidente en el caso de enfermedades crónicas, como la fibrosis quística. En este caso la diversidad microbiana en las vías respiratorias disminuye cada vez más, con dolor grave duradero".

Priv. Doz. Dr. Angela Zacharasiewicz – Doctora y Directora Médica, Departamento de pediatría y medicina infantil, Wilhelminenspital de Viena 

Microbioma/Microbiota de la piel y las mucosas – Alteración mediante la antisepsia de la piel y de las mucosas

"En nuestra piel se encuentra de forma permanente la denominada flora residente. Algunos tipos de microorganismos se pueden apreciar en prácticamente todas las personas, con independencia del lugar de residencia o el estilo de vida. Cabe diferenciar de este tipo la llamada flora transitoria, que llega a nuestra piel a través de factores ambientales. Es en este caso cuando actúa brevemente la antisepsia. Por lo general no pasa de aquí, no llega a influir de manera duradera en el microbioma. El caso de la antisepsia a largo plazo es diferente: entonces es posible que se produzca una alteración grave, hasta dentro de la flora residente. Los microorganismos pueden reaccionar de forma distinta. Algunos grupos particulares proliferan en detrimento de otros. Si esto ocurre durante un periodo prolongado de tiempo, puede producirse una infección".

Dr. Arno Sorger – Gerente de W.H.U. GmbH 

La relación de la salud con la higiene

El Foro internacional de higiene de Hagleitner ha tenido lugar en 2018 por segunda vez. Desde 2017 se ha convertido en un evento anual fijo en Zell am See. La palabra higiene proviene del término "Hygieia", un nombre tomado de la mitología antigua: en la antigua Grecia Hygieia era adorada como la diosa de la salud.

 

Consultas y contacto:

Hagleitner Hygiene International GmbH
Bernhard Peßenteiner
Portavoz de prensa
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